Verdes brotes, cabezas huecas, y glamurosas y levitantes gobernantas.

Permítame que le robe unos minutos comentando las mediáticas palabras de la Vicepresidenta Segunda después del singular, casi estrambótico, Consejo de Ministros en el que se autoalabaron y felicitaron por lo bien que estaban funcionando las cosas gracias a sus NOVENTAYUNA medidas (¡91, ni más ni menos!): “la situación empieza a tener algunos brotes verdes”, dicen que comentó la ilustrada Vicesegunda.. ¿Pues saben qué?

Que , aparte de la gracieta o aspecto primaveral del comentario, me parece de una irresponsabilidad y ligereza supinas. A saber,

_Que, suponiendo que todo marche sobre ruedas, hasta dentro de un año no tendremos resultados tangibles; o una buena cosecha, que es lo que nos haría mucha falta. Pero, en términos agrícolas, desde que sale el primer brote, verde, claro, las flores, los minúsculos frutos, hasta que se recoge la anhelada cosecha se sucederán múltiples situaciones climatológicas (heladas, frío o calor excesivos, pedrisco, lluvias torrenciales, vientos insoportables,..etc..) que pueden fácilmente malograr los necesarios sueños de quienes tantas horas, dinero, salud y esfuerzos han dedicado para poder seguir adelante. De preocupar, señores y señorías. Y mientras tanto, HASTA QUE LLEGUE EL DÍA DEL PROBABLE COSECHÓN ¿de qué vamos a vivir?. ¿Como vamos a resistir?. ¿A base de las subvenciones encadenadas de forma demagógica y con unas promesas totalmente carentes de fiabilidad alguna?. ¿O es que el nuevo Tio SAM, los iluminados y multimillonarios Jeques, o quizás algún Ayatholá o Dictador caribeño de medio pelo nos van a adoptar cual ositos Panda desamparados?. De preocupar my friends.

Pero no acaba ahí todo, no: a continuación vendrá el calvario de la “ venta del producto”, que si normalmente está quasi asegurada, no lo está tanto su precio razonable y mínimamente suficiente para poder sobrevivir e iniciar la siguiente campaña sin tener que comerse el propio patrimonio lentamente. Porque lo normal es, en la actualidad, y desgraciadamente, que las cooperativas de compra mundiales, europeas o locales fijen los precios de compra en función de los beneficios que necesitan obtener a final del ejercicio y habiendo contabilizando todos los costes necesarios de quienes intervienen en el proceso, que ellos sí tiene derecho a un salario justo y digno: tenderos, transportistas, manipuladores, envasadores, fabricantes de envases, abonos, pesticidas, herramientas,…etc. Toda la cadena productiva ha de ganarse la vida, sí, pero el propietario, el que lo arriesga todo, ¡que reviente!, y si el precio final es de 5, 10, o 15 veces el de la limosna que recibe, si es que le llega,..pues se siente.

Así que con esta perspectiva o visión agraria de la situación económica española, me permitirán que , cuanto menos, muestre mi razonado escepticismo ante tamaña candidez, ignorancia o mala fe.