sábado, 24 de noviembre de 2007

Manifestaciones... de miedo a perder las poltronas, prebendas y más.

El Gobierno de un País es algo muy serio, al menos para aquellos que a la muerte del Dictador teníamos, por ejemplo, 30 años. Que habíamos nacido, crecido, estudiado, casado y tenido hijos bajo el Régimen creado tras la terrible guerra civil, pero que había quedado enterrada en 1978. Pero vistas las repetidas declaraciones de las/ls ministras/os estrella del Gobierno de la Nación, con su Presidente al frente me temo que no es el caso.

¿Cómo es posible poder hacer comprender ahora, con la ecuanimidad debida, a quienes en aquel año tenían, por ejemplo 1 año (ahora con 33 cumplidos), o 5 (con 37 años ahora) o 10 ( ahora ya convertidos en unos veteranos de 42 tacos), lo que pasamos, aguantamos y tuvimos que apechugar para sacar adelante un país hundido tras aquellos tres años de contienda, agravados con las consecuencias de la Segunda Guerra mundial?. Me atrevería a calificarlo de “misión imposible”, porque el bombardeo mediático actual en contra, enalteciendo cualquier actuación realizada por los democráticos partidos de izquierda, por mas asesinatos que cometieran, y la condena y rechazo de toda actuación de los vencedores de la fratricida guerra es el dogma de fé, inapelable. La única verdad oficial existente y defendible. Palabrita del Niño Jesús. La discrepancia es anatematizada.

Y si a esto añadimos los casi cuatro años que llevamos de adoctrinamiento y bombardeo postbélico con las series de televisión “Cuéntame como pasó”, y “Amor en tiempos revueltos”, (¿no hubiese sido suficiente con dos añitos de matraca?) que machaconamente se vierten sobre los españoles como si agua de mayo se tratara, pero con una retranca o color mas bien rojizo, y antiderecha, se comprenderá que el guión cinematográfico que está siguiendo el Gobierno responde milimétricamente a una estrategia de mantener la tensión o pinza anti PP, según se estableció en el impresentable Pacto del Tinell, que está culminando con la aprobación de la innecesaria Ley de la memoria Histórica precedida del falso debate de la asignatura quasi nazi de la “Educación para la Ciudadanía”. ¿Qui prodest?. Pues a la vista está. Tan solo hay que leer los editoriales y portadas de los medios de comunicación escrita de los últimos 10 días, por no remontarnos demasiado.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Estimado Caminante, me parece que te has liado un poco pero te pillo la idea. Y para ayudarte en el planteamiento expondré un par de ideas y realidades,

Primera: que todos ellos, los jovenes entre los 14 y los 40 y pico de años, vean obligatoriamente la recientemente estrenada película "Lobos por corderos", y en el plazo de una semana presenten un resumen manuscrito de 20 folios de extensión sobre el film y su, digamos, moraleja o consecuencias ante el Director de su Colegio, Escuela o responsable del trabajo con la advertencia de que, de no hacerlo, se verán privados de la paga extra de Navidad o bien no se les aprobará el curso actual. Tal es la importancia que yo le concedo al contenido,intención y utilidad de la citada pelicula que, en ningun caso puede considerarse como la "tipica peli de los USAboys". Desgraciadamente ya nos hemos modernizado tanto que es aplicable para todo el Mundo, más o menos civilizado.

_Segunda: Manifestación de la AVT de esta tarde de sábado en Madrid. A la que llegado con cierto retraso, por lo que he salido a la superficie en la estación de Metro Alonso Martinez. Pero mi sorpresa ha sido compensada con la apabullante manifestación que transcurría por la superficie, que bajando por la calle Santa Engracia, y continuando por la calle Génova bajo una cortina o nube de banderas españolas de todos los tamaños desembocaba en la Plaza de Colón. Decenas de miles de ellas, en sus mástiles o bien sobre los hombros, espalda, goritos o pancartas de los manifestantes. Una gozada, que a buen seguro habrá, más que dsgustado, cabreado a los responsables de la izquierda, nacionalistas e independendistas. Pues, ajo y agua.

Anónimo dijo...

Muchas gracias por centrar el balón Optimista. Pero falta un corto mes para las Navidades y el personal ya no tiene ganas de que le vendan más motos. No, en estas fechas ya no. Cada uno se queda convencido de sus antiguos sentimientos, los que le llevaron a votar en el 2004, después de las ipresentables jornadas del 12 y 13. Y eso es triste. Pero nos queda la esperanza del Año Nuevo, con su pesada cuesta de Enero y Febrero, dias muy cortos y frios, y noches largas, todo ello muy apropiado para reflexionar.
Confiemos en ello.